Historias de los Tornados

La Cruz Roja Americana ha respondido a los desastres en cuatro estados, después de los tornados que tocaron tierra el pasado fin de semana en el centro del país.

La gente está luchando con la pérdida de sus seres queridos, la pérdida de sus hogares, la pérdida de todo lo que tenían. Estas son algunas de sus historias:

NIÑO ASUSTADO Thomas y Amanda Buster se pusieron de acuerdo a no ir al refugio de la Cruz Roja, después de que el tornado destruyo partes de su vecindario, y no su casa. "Otros lo necesitan mucho más", explicaron. Su hijo Benjamín no podía dormir la siguiente noche, por temor a otro tornado ("sonaba como un tren choo choo"). Thomas incluso intentó mostrarle a Benjamín el mapa del radar meteorológico en su teléfono, pero no tuvo éxito. Cuando llegaron al albergue el lunes, explicaron que "no podíamos quedarnos una noche más en la casa". Buster, un bombero jubilado y trabajador de rescate del condado, explicó que nunca había visto a la Cruz Roja en su trabajo como socorrista y, por lo tanto, no sabía qué pensar de la organización. Pero después de llegar al refugio el lunes y ver la operación, dijo que decidió unirse. "Puedo conducir un camión. ¿Necesitan choferes? "

Nuevo para nosotros La ganadora Mweneshele y Mwatwmw Omari se encuentran en el refugio de la Cruz Roja en Bowling Green. Winner explicó que, como refugiado congoleño, pasó 24 años en un campo de refugiados en Tanzania, donde recibió su educación primaria y secundaria. Estuvo elegible para ingresar como refugiado a los Estados Unidos en 2019, pero él y su familia no llegaron aquí hasta 2020, justo cuando la pandemia de COVID estaba en los Estados Unidos. Su hijo menor, Louis Winner, nació poco después de su llegada.

CASA DESTRUÍDA El yerno de Osman Zilic, había llegado a su casa en medio de la noche para advertirle sobre un tornado que se dirigía hacia él, pero Osman no podía decirle qué tan cerca estaban. No fue hasta que la hija de Osman, de 11 años, bajó las escaleras, con el teléfono celular en la mano, que supo que tenía que meter a toda la familia en un armario. "Justo cuando cerré la puerta, el techo se vino abajo", explicó. Los dormitorios donde dormían sus hijas fueron destruidos. Se quedaron descalzos junto con su esposa, en la oscuridad y con la lluvia cayendo sobre sus cabezas. Cuando finalmente salieron de la casa, explicó Osman, comenzaron a caminar en la misma dirección que otros que iban a millas de distancia en la escuela primaria del condado de Jennings, la cual se convirtió en el principal refugio de la Cruz Roja en la región. Osman, quien nació en Bosnia y emigró a los Estados Unidos en 1995, contó su historia en croata, al fotógrafo de la Cruz Roja Marko Kokic.

CUIDADO ESPIRITUAL Después de perder su casa y todas sus posesiones en el tornado de Kentucky, Robert y Norma Valdivieso salieron de la protección de su bañera y se dirigieron a un refugio de la Cruz Roja. Fueron recibidos de inmediato por la especialista en cuidados espirituales Deane Oliva. "Habló con nosotros de lo que acabábamos de vivir, y nos explicó lo que podía hacer por nosotros", explicó Valdivieso. "Ella fue muy cariñosa. Muy reconfortante. Muy genuina ". La pareja dijo que se necesita una persona muy especial para hacer lo que Deane hizo por ellos esa noche, que fue muy inspirador. Después de esa primera noche en el refugio, su amigo pudo conseguirles una habitación de hotel por algunas noches. Cuando se les preguntó por qué regresaron al refugio, simplemente dijeron "sentir el amor". Después de jubilarse como neuropsicóloga clínica, Deane Oliva fue a un seminario para convertirse en ministra y en 2017 se unió a la Cruz Roja para trabajar en servicios de desastres. "Atendemos las necesidades emocionales, espirituales y físicas de las personas", dijo. "Este es un ministerio de presencia".

SER VOLUNTARIO ES EN UNA BENDICIÓN Judy Cothern fue una de las muchas voluntarias que llegaron a Bowling Green después de que pasó el tornado. Vive en Franklin, "la siguiente ciudad", y no era ajena a Bowling Green. - su nieta vive ahí. Judy trabajó en el turno de noche mientras la gente dormía, también muchos inmigrantes que no podían hablar inglés. - lo cual estaba bien, dijo Cothern, porque "solo necesitaba cubrir a sus bebés". Comenzó a trabajar como voluntaria en la Cruz Roja Americana hace 16 años después del huracán Katrina. Este es su undécimo despliegue. Ha estado en los incendios forestales de California y el huracán Florence, entre otros lugares de desastre. Se emociona cuando explica por qué hace este trabajo. "La gente dirá que Dios te bendiga y yo digo que ya lo ha hecho. Saco bendición de eso ".

AYÚDENOS Haga una donación a Ayuda en casos de desastre de la Cruz Roja, para ayudar a las personas afectadas por desastres, como tornados y otras crisis. Para hacer una donación de dinero, o programar una cita para donar sangre o plaquetas, visite redcross.org/donar o llame al 1-800-RED CROSS (800-733-2767). También puede utilizar redcross.org/aplicacionesmoviles o enviar un mensaje de texto con la palabra REDCROSS al 90999 para hacer un regalo de $10 hoy. Cada contribución es importante. Su donación es un compromiso para ayudar a las personas necesitadas y permite a la Cruz Roja prepararse, responder y ayudar a las personas, a recuperarse de desastres sean grandes o pequeños.

Para aquellos interesados en ayudar a las personas afectadas por los tornados recientes, les pedimos que escriban "Tornados del Sur y del Medio Oeste" en la nota del cheque y lo envíen por correo con un formulario de donación a la dirección en el formulario de su capítulo local de la Cruz Roja (en inglés) .